domingo, 17 de julio de 2011

Rasgos de una sociedad razonablemente moderna.

Entre los rasgos o características que suelen aducirse para establecer la condición o el grado de modernidad de una sociedad, según Salvador Giner se encuentran habitualmente los siguientes:

1-  Desarrollo de las comunicaciones: la sociedad moderna está altamente comunicada entre todos sus puntos; en ella, el espacio social tiene un bajo nivel de correlación con el espacio geográfico; la circulación de bienes, personas e información es extremadamente rápida, lo cual implica una presencia inmediata del centro en la periferia. Sociedad moderna es, también, aquella en la cual hay medios técnicos de comunicación de masas: prensa, radio, televisión, cine, lelégrafo, teléfono, lélex, internet, etc.

2-  Hedonismo, consumismo, secularización: el habitante de la sociedad moderna es característicamente individualista, adicto a los derechos, libertades y consumos personales; una cierta forma de hedonismo impregna su comportamiento. El principio de la "autorrealización" en un Contexto de relaciones competitivas tiende a convertirse en valor dominante. Por otra parte, este desarrollo individual aparece ligado al acceso abundante a bienes y servicios, bien por la vía del consumo privado, bien por la vía de los servicios públicos (considerando que el estado es responsable de determinadas parcelas del bienestar de los individuos). Ambos aspectos se conectan, finalmente, con una tendencia a la secularización de los valores, lo que no implica la desaparición de la cultura religiosa, sino sólo la pérdida del monopolio por parre de ésta.

3-  Preponderancia de los grupos asociativos: sin desaparecer, las formas comunitarias de agrupación van perdiendo funciones y significado en la vida de los individuos. Así, por ejemplo, si bien la familia continúa siendo un ámbito primordial de relaciones humanas básicas, pierde importancia como espacio de la socialización (a favor de la escuela, los medios de comunicación, etc.) y como unidad económica. Las formas asociativas o secundarias de agrupación (profesional es, sindicales, ideo lógicas, políticas,etc.) pasan a ocupar un lugar preeminente. Los mecanismos de identificación emocional se desplazan a ámbitos más amplios, como la clase social o la nación.

4-   Autoridad legalista y racionalidad burocrática: las formas políticas de la modernidad se caracterizan por la consolidación del Estado (homogeneización del poder sobre el conjunto del territorio), de la forma burocrática de administración del poder y de la referencia a la voluntad popular o nacional como principio de la legitimidad (con formas democráticas, populistas o dictatoriales). 

5- Industrialización, urbanización: característica de la sociedad moderna es la preeminencia de las actividades económicas de industria y servicios frente a las del sector primario (agrícolas y extractivas). De hecho, uno de los indicadores más utilizados para describir los procesos de modernización es la evolución sectorial de la población activa. Asimismo, suele considerarse que el proceso de industrialización comporta la concentración de la población en ciudades y, también, la configuración de estructuras sociales y formas de estratificación complejas, basadas en una sofisticada división del trabajo. Ligado a esta dimensión de la modernidad estaría un crecimiento económico sostenido, con una elevada producción por habitante a causa de la innovación tecnológica y de la racionalización.

6-   Institucionalización del conflicto y de los cambios en la estructura: los diversos grupos de intereses son reconocidos e institucionalizados. se establecen normas para dirimir los conflictos y mecanismos de arbitraje y conciliación; el estado asume funciones de mediación entre los diversos agentes económicos y sociales. Los procesos de reproducción de las estructuras según atribuciones heredadas (élites cerradas, clases altas poco permeables, sistemas educativos muy poco abiertos a estudiantes de extracción popular) van dando paso a procesos basados en el logro, con estructuras de estratificación más abiertas.

El bienestar humano según Amartya Sen


Amartya Sen
El bienestar humano es el estado en que los individuos tienen la capacidad y la posibilidad de llevar una vida que tienen motivos para valorar. La capacidad de las personas para procurarse una vida que valoren está determinada por una diversidad de libertades instrumentales. El bienestar humano implica tener seguridad personal y ambiental, acceso a bienes materiales para llevar una vida digna, buena salud y buenas relaciones sociales, todo lo cual guarda una estrecha relación con y subyace a la libertad para tomar decisiones y actuar:

- La salud es un estado de absoluto bienestar físico, mental y social, y no simplemente la ausencia de enfermedad. Tener buena salud no solo significa estar fuerte y sano y sentirse bien sino también estar libre de enfermedades prevenibles, tener un entorno físico saludable y acceso a energía, agua segura y aire limpio. Lo que se puede ser y hacer supone, entre otras cosas, la capacidad para mantenerse en una buena condición física, minimizar la preocupación por la salud y garantizar el acceso a atención sanitaria.

- Las necesidades materiales están relacionadas con el acceso a los bienes y servicios de los ecosistemas. La base material para tener una buena vida incluye medios de sustento asegurados y adecuados, suficientes alimentos y agua limpia en todo momento, alojamiento, vestido, acceso a energía para calefacción y acondicionamiento de aire y acceso a bienes.

- La seguridad está relacionada con la seguridad personal y ambiental. Implica el acceso a recursos naturales y de otro tipo y estar libre de violencia, actividades delictivas y guerras (motivadas por fuerzas motrices ambientales), así como seguridad frente a catástrofes naturales y provocadas por la actividad humana.

- Las relaciones sociales hacen referencia a las características positivas que definen la interacción entre los individuos, como la cohesión social, la reciprocidad, el respeto mutuo, buenas relaciones de género y familiares y la capacidad para ayudar a los demás y mantener a los hijos.

Aumentar las oportunidades reales que las personas tienen para mejorar sus vidas requiere abordar todos estos aspectos. Esto está estrechamente ligado a la calidad del medio ambiente y a la sostenibilidad de los servicios proporcionados por los ecosistemas. Por lo tanto, es posible realizar una evaluación del impacto del medio ambiente en el bienestar de las personas mapeando el impacto del medio ambiente en los distintos componentes del bienestar.